Por fin, Olivia Palermo para Mango

Hace poco más de un mes supimos que una de las ‘it girls’ más solicitadas del momento, Olivia Palermo, y su novio, el modelo Johannes Huebl, protagonizarían el catálogo de invierno de Mango. Y por fin ayer pudimos ver las imágenes en la que esta pareja de guapos –creo que soy objetiva, no?-  posa con las nuevas propuestas de fiesta de la firma española.

¿Qué os parecen los modelitos? ¿Os compraríais alguno? Y, de ser así, ¿Cúal?

FOTOS: Mango.

Un Puente, Cuatro Looks

Con el despiste que tengo últimamente no fue hasta ayer cuando, hablando con una amiga, me di cuenta de que este fin de semana hay puente. Y yo… ¡con estos pelos! Sin ningún tipo de plan especial que, de haberlo sabido, habría preparado con antelación.

Seguro que muchas de vosotras optaréis por hacer una escapadita. Bien en plan rural, urbanita o playera (porque sí, sigue habiendo gente que –afortunada ella- se va de fin de semana a la playa –se nota la envidia, ¿no?-) lo importante es ir acorde a las circunstancias.

Por eso he pensado que qué mejor ocasión para plantearos cuatro estilismos en función de los planes que tengáis para este fin de semana.

¿Habéis escogido una casita rural con vuestra pareja y amigos? Eso no significa ir ‘de chandalista’ –como dice siempre una amiga mía- . Y si no, mirad lo ideal que va Kate Moss (aunque tampoco es novedad): unos simples jeans, camisa, botas y tan mona!

Tank Top, THEOUTNET.COM

Camisa, TOPSHOP

Jeans, TOPSHOP

Parka, H&M

Bolso, MANGO

Collar, NET-A-PORTER

Cinturón, DOROTHY PERKINS

Botas, HAKEI

(Como veis mi propuesta incluye una parka militar que nunca se sabe cuando cambiará el tiempo)

Otra opción, que a juzgar por mi capacidad previsora creo que elegiré, es la de hacer una escapada e ir comer a algún pueblo cercano a la ciudad, o a algún sitio pintoresco. Aún no hace demasiado frío como para renunciar a esos pequeños placeres. El look de Rachel Bilson me parece perfecto para una ocasión como ésta.

Tank Top, THEOUNET.COM

Jeans, TOPSHOP

Blazer azul, TOPSHOP

Bolso, ZARA

Foulard, ZARA

Botas, ZARA

Si optáis por quedaros en la ciudad –sinceramente, da gusto cuando media capital se va de puente y la otra media disfruta de las ventajas de una gran ciudad sin que esté todo hasta los topes-, no hay nada mejor como un look cómodo pero chic a la vez. De eso sabe mucho Alexa Chung –una monada-. (Eso sí, yo le quitaría el copazo de la mano. No es plan, ¿no?)

Vestido estampado, MASSIMO DUTTI

Abrigo, ZARA

Bolso, ZARA

Cinturón, ZARA

Botines, BIMBA&LOLA

Y he dejado para el final la propuesta que, a mi parecer –y con las temperaturas tan poco agradecidas que están por llegar- es la más atractiva: la playa. ¿A quién no le gustaría estar tumbada en la arena, paseando por la orilla del mar o, si me apuras, aguantando a los niños del vecino de al lado porque no dejan de tirar la pelotita –¡qué rápido se olvidan las cosas!- Yo firmaba. Sólo con mirar la fotografía de Jennifer Aniston me entra una envidia… -creo que, a estas alturas y en este caso, no es nada sana-  La misma que siento cuando sé que algunas de mis amigas –previsoras ellas  (hasta al simple hecho de tener un calendario laboral sobre la mesa se le llama ser previsora)- me comentaron que se iban a la playa para “aprovechar los últimos rayos de sol”. Arggg!!

Jersey de pico, THEOUNET.COM

Short, TOPSHOP

Gafas de sol, CHANEL

Sandalias, HAKEI

Capazo, DRAGONA FLY

Y tú, ¿Qué haces este Puente? Y mejor, ¿Qué te pondrás?

¿Un 40% de descuento? Me apunto

Me encanta abrir el correo y comprobar que una de mis marcas favoritas me acaba de enviar un e-mail anunciándome que desde el 25 de octubre y hasta el 25 de noviembre podré disfrutar de un 40 por ciento de descuento en algunos de sus artículos. Y pienso; “¿Un 40 por ciento? Me apunto”.

No hace falta dar más pistas, ¿no?

Además, pensándolo bien, a las más previsoras les parecerá una gran idea de cara a las compras navideñas (que sí, que será una locura, pero en Madrid ya están poniendo las luces de Navidad y muchas tiendas ya tienen la decoración propia de esas fechas. Y yo, sigo en mis trece y me niego a poner medias).  Para otras que, como yo, lo dejan todo para última hora les hará la misma ilusión porque al fin y al cabo…Nos merecemos un caprichito, ¿no?

Y tú, ¿Aprovecharás el descuento? Espero que des buena cuenta de ello a Timeless In Style.

Por Prescripción Facultativa: Zapatos de Salón

Algunas de mis amigas suelen reírse a menudo de mí porque me encantan los zapatos de salón. Recuerdo cierta ocasión en la que decidimos ir un fin de semana a una casa rural y no dejaron de provocarme con frases del tipo: “A ver con que taconazos apareces”, “No puede ser verdad, es imposible que estés cómoda con eso”, “Mi madre era como tú y ahora…no quiere oír hablar de tacones” y similares. Evidentemente, me encantan los tacones pero no rozo la enfermedad y me adapto al lugar al que voy (¡faltaría más!)

Esos comentarios quedaron zanjados después de un día de shopping en el que a pesar de haber ido con botas planas acabé con un tremendo dolor en los pies  que me llevó a Urgencias porque llegó un momento en el que no podía caminar. “Tienes el pie abierto. Creo que estás demasiado acostumbrada a ir con zapatos de tacón, ¿verdad? Pues úsalos siempre”, me dijo el médico que me atendió. Y desde entonces…por prescripción facultativa. (Obviamente, hacemos excepciones del tipo campo, montaña, playa, etc… Mis pies son sensibles pero pueden soportarlo).

Os podéis imaginar lo feliz que me sentí allá por el mes de febrero cuando vi que los salones de siempre se convertirían en una de las tendencias más chic de esta temporada. Eché la vista atrás y maldije haber tirado unos Pura López a los que veneraba porque “volverían de nuevo este tipo de zapatos pero…ya me compraré otros”, me dije. (Si, a veces, tiene razón mi madre: “Tan lista para unas cosas, hija y para otras…”).

Y es que si echáis un vistazo a las revistas de moda en todas ellas aparecen estilismos con el clásico (renovado) zapato de salón –llamado así porque antes era usado en actos oficiales y ceremonias-. Combinados con faldas de vuelo –las encontramos en casi todas las tiendas del imperio Inditex y similar-, vestidos retro o pantalones. Tanto para ir a la oficina como para salir a cenar. Con más o menos tacón, punta afilada o redondeada, con plataforma o sin ella, con detalles tipo joya o lazos, de piel labrada o dibujada. No importa cómo sean, lo que realmente importa es ponérselos.

Desfile Ángel Schlesser A/W 2010-11

Desfile Elio Berhayer A/W 2010-11

Desfile Louis Vuitton A/W 2010-11

Desfile Prada A/W 2010-11 

Los diseñadores ofrecen una gran variedad de modelos, colores y materiales.

Aunque también podemos encontrarlos a precios más asequibles.

Y tú ¿Eres de las que usan salones ‘por prescripción médica’ o prefieres un tipo de calzado más cómodo?

FOTOS: Gloria Ortiz, Mango, Topshop, Vogue, Zara.

En busca y captura

Lo vi por primera vez a finales de agosto, en un catálogo. Por aquél entonces no quería oír hablar de nada que me recordara al otoño. Claro que eso me duró dos días. El tiempo necesario para darme cuenta de que todas las revistas de moda, los escaparates, la temperatura casi bajo cero -sí exagero un poco-  en el interior de las tiendas me conducían a lo mismo: ¡que vuelva el frío ya!

Dos días después (esos que tardé en darme cuenta) regresé a la tienda. Pregunté una, dos, tres… un montón de veces por aquel vestido que me llamaba a gritos. Hasta que perdí la cuenta. Siempre me decían lo mismo: “Aún no ha llegado”.

Uno de esos días en los que paseaba por la calle Serrano me dije: “Eres muy pesada, mucho, pero vas a entrar y a preguntar otra vez por él”. Y eso hice. Ese día recibí la noticia: “Me han dicho en la convención de la semana pasada que será una pieza limitada y habrá muy pocas por tienda”. “Una será mía”, pensé yo. “Déjame el teléfono y cuando llegue te llamo”. Y así fue.

Dos semanas después  -cuando las chicas de Bimba&Lola de medio Madrid ya empezaban a echarme de menos-, me llamaron de la tienda que hay en el ABC Serrano para decirme que había llegado. Fui esa misma tarde con la única intención de llevarme ese vestido que me haría tan feliz –aún sabiendo que hasta octubre o noviembre no lo estrenaría-.  Cuando lo tuve en mis manos por primera vez pensé: “No es para tanto, no?” Con la lata que había dado y ahora…

Me lo probé y mi idea cambió por completo. Seguía pareciéndome tan bonito como un mes antes, cuando lo ví en el catálogo. Así que después de varios giros, paseos por el probador y pensamientos acerca de con qué ponerlo y con qué no tomé la decisión. “Me lo llevó”, le dije a una de las chicas. (Además, mi novio me amenazaba con regalármelo. Estaba entre la espada y la pared. Ya sabéis a qué me refiero). “Que sepas que es el único que tenemos y el otro lo colocaré mañana en el escaparate. Además, como se inaugura la nueva calle Serrano, tienes un 10 por ciento de descuento”. Casi se me saltan las lágrimas. No por el 10 por ciento de descuento –que también, para qué negarlo- sino por el simple hecho de que había terminado mi ‘acoso y derribo’ a casi todas las tiendas de una de mis marcas de referencia. Si es que… hasta lo echo de menos…! (empiezo a pensar que lo mío era un TOC).

Ahora, cuando ya ha pasado otro mes de la compra, el vestido, con acabado hand made - una de las tendencias de esta temporada-, de lana gruesa,  color hueso y con falda de volantes muy corta, sigue colgado en mi armario. Eso sí, en cuanto haga un poquito más de frío…

Y a vosotras, ¿os pasa lo mismo que a mí? ¿Sois de las que veis algo y hasta que no lo encontráis no paráis, aún sabiendo que pasará tiempo hasta que lo estrenéis?

Fotos: Bimba&Lola

Working Girl

¿Cuántas veces te has sentado a las siete de la mañana delante del armario y has dicho eso de ‘Y hoy, ¿qué me pongo?’ Porque lo que es yo… unas cuantas. Confieso que ahora, y desde hace ya un tiempo, procuro pensar el día anterior qué es lo que me voy a poner al día siguiente (incluso, a veces, el domingo pongo a funcionar la materia gris y me hago un planning de lo que será la semana en lo que a estilismos se refiere –claro que de ahí a que lo cumpla…-).

El otro día una amiga me comentaba que se veía ‘rancia’ a la hora de vestirse para ir a la oficina. A lo que le respondí que despacho/oficina o donde quiera que trabajes no tiene que estar reñido con ir a la moda y ‘chic’ (claro que ahora se me viene a la cabeza mi hermana, vestida toda ella con un mono verde… Es lo que tiene ser veterinaria y pasearse día sí y día también por cuadras y granjas. Este tema lo dejaremos para otro momento. Será algo así como: “Estilismos para ir mona cuando todas las fuerzas se alían contra ello”).

El look lady, que vuelve con fuerza este otoño, será uno de tus aliados si lo que quieres es dar una lección de coquetería allá a donde vayas.  Blusas blancas, con chorreras o lazos – tan actuales-, dan un toque de elegancia a cualquier cosita que te pongas.  

Olivia Palermo es asidua a este tipo de estilismos y nosotras podemos encontrarlas, muy parecidas, en Zara y en Mango.

Ésta De Hoss Intropia me encanta. En realidad, me gusta todo el estilismo.

La falda lápiz es otro de los básicos del estilo lady que podemos utilizar para ir a la oficina.

En Asos encontramos numerosos modelos que bien con camisa blanca o blusas estampadas sientan de maravilla.

Incluso, esta temporada apuesto por este mismo estilismo con jersey de cuello alto –evidentemente, depende del tipo- que, afortunadamente, encontraremos en casi todas las tiendas. Y si lo prefieres con pantalón, apúntate las ideas que nos ofrecen Comptoir de Cotonniers –hay cosas ideales y si no, mira la capa, que le da otro toque al outfit- y Massimo Dutti –más de lo mismo-.

A veces, resulta más cómodo decantarse por vestidos -por eso de sólo tener que pensar en una única pieza-. Tanto si son entallados como vaporosos podemos combinarlos con un montón de prendas y complementos que darán un estilo u otro a tu look.

Si por algo destaca Asos es, precisamente, por sus vestidos. El rojo tulipa me parece ideal para salirse un poco de la rigidez de los colores otoñales (además está más de moda que nunca).

En Bimba y Lola encontramos varios modelos muy monos y apropiados tanto para ir al trabajo como para salir. Eso sí, cambiando los complementos.

No podemos olvidarnos de los pantalones. Este año, los de tiro alto y de corte masculino nos aportarán seriedad y clasicismo a nuestro look. Si, por el contrario, prefieres los baggy, estás de enhorabuena porque en casi todas las tiendas encontramos alguno. Son súper cómodos y depende de con qué los acompañes te proporcionarán un toque u otro. Un filón en el armario.

Y los viernes, que en determinados sectores y empresas el look es un poco más ‘relajado’, podemos introducir prendas más casual. Los pantalones de estilo militar de la derecha –de Comptoir de Cotonniers-  me gustan (y mucho). (Zara tiene una versión un poco más económica que la cadena gala).

Fotos: Asos, Bimba&Lola, Comptoir de Cotonniers, Hoss Intropia, Massimo Dutti.

El temido cambio de armario

Desde el momento en el que El Corte Inglés empieza a anunciar los cambios de temporada comienzo a sentir una especie de pavor… ¡Horror! Lo he estado posponiendo todo lo que he podido -y más-, pero, al final, todo llega. El otoño ya está aquí y con él el temido cambio de armario. (Leído así parece que cojo el teléfono, hago una llamadita y llega un nuevo armario cargado de ropa de temporada. ¡Ilusa de mí!)

Realmente, sé que debería haberlo hecho mucho antes. Por ejemplo, aquél día –no hace mucho- en el que estaba decidida al cambio pero, no sé porqué razón, alguien me convenció para que esperara hasta que pasara el ‘veranillo de San Miguel’. Y así lo hice. ¡Maldita la hora! Si vas a hacer una cosa, si estás decidida, ¡adelante! Pero no. Claro, que de esto me doy cuenta ahora cada vez que abro el armario y veo que los vestidos de verano se están haciendo fuertes y se resisten a salir.

Si algo he aprendido con el paso de tiempo es que hay que sacar el lado positivo de las cosas. Y eso he hecho. Hay prendas que están destinadas a pasar más de una estación con nosotros. Y si no, echa un vistazo a tu alrededor. Te habrás dado cuenta de que, salvo vestidos o camisetas de playa, casi todo puede servirnos para un outfit otoñal.

Los vestidos estampados han pasado de ver en las sandalias a sus compañeras perfectas (aunque no siempre) y se han decantado por las botas o los botines. Y para el frío, nada mejor que un cárdigan de lana. Se harán inseparables.

Aunque es cierto que cambia el tejido, los shorts llevan varias temporadas entre nosotros como prenda imprescindible de los meses más fríos del año. Con unas buenas medias o leotardos… ¿quién dijo miedo?

Recuerdo que hace tiempo una ex compañera de trabajo me sugirió que los pantalones blancos eran sólo para el verano –se pensaba que era como lo de las bicicletas, creo-. Yo hice caso omiso. Me niego a limitar mi armario a colores oscuros y prescindir de prendas blancas cuando, personalmente, me encantan. Es cierto que no lo vas a acompañar con los mismos complementos que en verano, pero ofrecen mil posibilidades. Con jersey de cuello alto, botas y abrigo camel –el rey del otoño tenía que salir en algún momento, no?- quedan muy bien. O, al menos, a mí me gusta.

Si algo he de agradecer a la moda es que pueda aprovechar las sandalias. Me da una rabia horrorosa gastarme una pasta en zapatos para que, en algunos casos, se queden muertos de risa en el armario (algunos fuera porque ya no caben). Ahora podemos sacarle mucho más partido. Sobre todo, a aquellas con suela de madera que, tanto con medias como con calcetines, pueden cambiar un estilismo por completo.

Visto así… el cambio de armario no es tan doloroso.

Y a ti, ¿te pasa lo mismo?

Is it raining? Go Away!

Confieso que odio los días de lluvia. A pesar de haber nacido en el norte, no acabo de acostumbrarme a los otoños ‘pasados por agua’. Cuando no es por el pelo, que se te encrespa, es porque no sabes qué ponerte.

Menos mal que con el paso del tiempo y la entrada en escena de las famosas Hunter (ya ha llovido –nunca mejor dicho- desde que Kate Moss apareciera con ellas en el famoso festival de música de Glastonbury) a todas nos apetece mucho más salir a la calle y lucir, de una forma u otra, nuestras botas de agua. Y es que… ¿quién no tiene ya las suyas? No importa la marca –como dice mi novio: “las de Leroy Merlin de jardinero están muy bien”- , el color o la textura. Lo importante es ponérselas.

Desde las clásicas en color negro, navy o verde hasta las más atrevidas, como las rojas o fucsias que, por sí solas, se convierten en protagonistas del cualquier outfit.

Para las más sofisticadas, ya el pasado año vimos las espectaculares botas en piel de cocodrilo que Jimmy Choo diseñó para Hunter. Una maravilla de no ser por los más de 280 euros que cuestan (y que, sinceramente, a día de hoy, prefiero gastármelos en otra cosa. Rachel Bilson -monísima siempre- no opina lo mismo).

Este año, Valentino ha optado por incluir el encaje en el diseño de sus botas de agua, Giuseppo se ha decantado por el print animal y la marca italiana Pirelli Pzero ha elevado a las alturas las katiuscas de toda la vida incorporando tacón a las mismas. Será lo más, pero por ahora no lo veo, la verdad.

Y tú, ¿ya tienes las tuyas?

Fotos: Elle, Embelezzia, Gioseppo, El Blog de María León